Citas célebres

jueves, 16 de abril de 2009

Ana



Seguramente habréis oído hablar de Ana, también conocida como anorexia.

Nadie quiere ser su amigo, pero aveces no hay más remedio que serlo.

Mi historia empieza hará ahora 2-3 años aproximadamente. Yo nunca me había preocupado por mi peso, pero después de una serie de comentarios precedentes de mi familia, amigos, conocidos y no tan conocidos, empecé a ver mis muslos y culo enormemente grandes. Y no fue hasta un día que fui de compras con mi madre y vi como todos los pantalones que me probaba me sentaban como una patada en el culo, cuando decidí que tenía que hacer algo al respecto para dejar de ser esa chica gordita.

Primero de todo, empecé por cenar más ligero, dejando atrás las patatas fritas y sustituyéndolas por ensalada y comidas menos calóricas, aunque parezca una tontería con tan sólo eso, adelgacé mucho el primer mes (3 kilos más o menos). Pero yo no me conformaba con eso, quería ser como las modelos que aparecen en las revistas, contaba las calorías de los alimentos e intentaba no pasar de las 900 calorías (cuando según los nutricionistas hay que consumir unas 2000 calorías y sobretodo yo que por ese entonces tenía 14 años).

Era horrible, sólo me preocupaba mi peso y lo que comía, hubo veces que incluso me arrepentía tanto de haber comido algún dulce o algo de bollería, que más de una vez pensé en vomitarlo (por suerte, nunca lo hice).

En fin, el caso, es que en unos 5-6 meses, había adelgazado casi 10 kilos. Ahora cuando veo una foto de aquella época, me da hasta repelús verme de lo delgada que estaba.

Por suerte, esa época ya pasó, aunque todavía aveces Ana intenta volver a ser mi amiga.

Dedicado a todas las Anas y las Mias, chicas podéis superarlo, no dejéis que Ana se apodere de vosotras!!!

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